Más de 6000 niños de colegios catalanes y de Zaragoza, Burgos, Cartagena, Castro Urdiales y Asturias han experimentado ya la aventura de ser nanoinventores. El proyecto Nanoinventum tiene como principal objetivo la introducción de la nanotecnología, la sostenibilidad y la creatividad en primaria. Aunque la edad recomendada es de 5º a 6º de primaria, hemos tenido alumnos de 4º y 1º de ESO”, nos cuenta el creador de la idea, el nanoescopista Jordi Díaz.

Desde el programa NanoEduca, ha realizado actividades orientadas a profesores y alumnos de secundaria y ha creado el Nanokit, un pack con varios materiales que permiten profundizar en el mundo de la nanociencia a través de la experimentación. Por otro lado, para los niños de primaria con mucha imaginación y ganas de crear sus propios nanorobots, Jordi Díaz cuenta con el proyecto Nanoinventum, que contamos en estas páginas.

En Nanoinventum, el profesorado tras una formación, trabaja en el aula con el alumnado con un maletín experimental. Cuando acaba el trabajo experimental, el alumnado ha de pensar una solución a un reto ODS a través de la creación de la maqueta de un nanorobot.

El proyecto se divide en diferentes fases. Comienza con la formación del profesorado y el trabajo en clase por parte del alumnado con el maletín NANOEXPLORA. Le sigue la fase de creatividad, en que el alumnado escoge un reto ODS y le tiene que dar solución a través de la creación de la maqueta de un nanorobot. En esta fase, una NANOEXPERTA visita la escuela y se prepara la presentación de las maquetas del alumnado en una feria final.

736 niños se juntaron en mayo en el Poliesportiu de Molins de Rei compartiendo ideas orientadas a solucionar los retos de sostenibilidad que nos acechan con imaginación…y mucha nanotecnología.

736 niños se juntaron en mayo en el Poliesportiu de Molins de Rei compartiendo ideas orientadas a solucionar los retos de sostenibilidad que nos acechan con imaginación…y mucha nanotecnología.

 

Jordi Díaz ejerce como Manager de la Unidad de Técnicas Nanométricas en la Universidad de Barcelona. Su pasión por la divulgación de las nanociencias le ha llevado a impulsar numerosos proyectos en este campo. Nanodivulga UB, por ejemplo, tiene por objetivo establecer un diálogo entre investigadores, sociedad civil, industria, administración y educación sobre las oportunidades que ofrece la nanotecnología y su repercusión en nuestras vidas.